sábado, 19 de febrero de 2011

Atravesando machete en mano



Dando tumbos sin destino,
en la jungla de hormigón,
buscando qué buscaba,
entre arbustos de números
un animal vine a encontrar,
hijo de las norteñas montañas,
tigre de fría y blanca nieve,
suave, bravo, tímido,
de mirada de piel de uva,
intensa y desafiante y triste,
y colmillos de pícaro ratón,
encerrado en sí mismo, fiero,
de pequeñas doradas zarpas,
que al mínimo envite atacó,
dos invisibles arañazos
y desapareciose, sin más,
desde entonces investigo,
tras cada metálica palmera,
para verlo y recuperar,
los pedazos de tinta
que me logró arrancar.

A.O.M.