Con__go vivo, sin __ sobrevivo

El __empo se detuvo,
mi mirada comenzó a en__znarse
mientras __raba plegarias en tu nombre,
me sen__ indefenso, frío, ar__co,
al borde del acan__lado predicho,
ar__culando gilipolleces entre __ritonas
llegó el momento crí__co,
y la opresión en las cos__llas pasó a ser algo co__diano,
a la vez que la combus__ón interna
hacía florecer un decaden__smo evidente
que me bajó de una os__a de mi sép__mo cielo,
me par__ó la cara en un flash,
descuar__zó una estabilidad, no se si común,
repar__endo mis pedazos e__quetados por tus labios
a des__nos que aún desconozco,
finalicé junto a tu diver__mento, o eso creo,
y me sen__ dis__nto, más ligero,
menos 21 gramos, sin si__o, más necesitado,
a merced de tu campo magné__co,
que me recordaba lo que un día exis__ó,
mas caducó mor__ficando mis sen__dos
a la vez que mul__plicaba mi desidia global,
repar__endola con mi mirada mus__a,
mu__lando cualquier a__sbo de felicidad,
arrasando como A__la,
contagiando el mundo con una apa__a
cuyo an__doto solo lleva tu nombre...
Sácame de este fé__do y vomi__vo estado,
o acércate y aprieta el ga__llo,
pues esta __erra de piel de lagar__ja por el has__o de tu ausencia
las__ma al que se arrima,
así que ajus__ciame o llévame a mi en__erro,
porque esto sin TI, ya no __ene sen__do...

Ti, significado

Oh mi Diosa, quiere, que yo me encargo del resto

Son tus risas y tus sonrisas,
tus caricias escalofríantemente esponjosas,
tus besos siempre a tiempo
como un salvavidas,
sacándome de este mar de agua salada
manantial de terremotos autoproducidos
por recuerdos punzantes de mierda equivocada,
besos de esos gruesos e intensos
que me hacen de ti preso y calan en los huesos,
y me los rompen, y luego firman en el yeso
corazones impresos, sacándome de este mundo ileso,
traviesos y espesos pero nunca en exceso...
y me convierten en un obeso obseso por el peso
que dejo de ganar si no te apreso entre mis labios,
así que nunca ceso en eso y me confieso esclavo
de tu sinhueso y me embeleso y por mucho que abuse
no desintereso y me sorben el seso...
el poco que todavía no te pertenece,
porque tabique ya me falta de mi vicio,
ese que hizo de tarzán y me sacó de la jungla de la nada,
que me dio un traje y dinero para perseguir mi sueño,
que cuando pillo me hace más feliz que un niño en el recreo,
que nunca falla, tan eficiente,
tan adictiva que hace que mis dedos chillen:
¡Acaríciala una vez más joder!
pero luego jode, cuando la distancia que nos separa
es mayor que el diámetro de los átomos del boli,
con el que acuchillo en el papel estas lágrimas de sangre
que por mis poros rezuman,
porque ya no cabe el plasma, mis venas andan desbordadas
con tu cara dibujada en todas las fachadas
de las cutres viviendas de mis células,
que no descansan y adictas al cine se pasan las noches en vela
reviendo la misma película cíclica en la que,
como no,conmigo nunca acabas,
y beatas como nadie procesionan con tu imagen,
haciendo que me arrodille ante tu presencia,
diosa de mi religión exclusiva
en la que sólo yo me admito,
y para nadie más hay hueco y no hacen falta,
que yo solo me basto para tenerte culto
y venerarte de manera innata,
con celibato obligado por mis necesidades,
por no potarle a nadie en la cara,
porque la sombra de tu recuerdo es alargada
y las carantoñas que no llevan tu firma
únicamente ronchas dejan en mi espalda,
y duran menos que flores sin agua,
y no llenan nada, porque el tapón de seguridad se puso,
y la botella cara no se rellena con una barata,
porque las palabras por una vez tuvieron el valor que debían
y ahora pago el precio de no haber sabido apreciarlas
y desperdiciarlas,
en vez de pronunciarlas por primera vez
en la puta preciosidad de tu cara,
porque el sol más allá de tus colinas no nace,
y el miedo a la oscuridad sin ti arrecia,
porque estoy en ese punto de no retorno
en el que mi vida ya no es mía nunca más,
es para ti, en ese punto,
 para ese punto.

Rallada y miel

Famélico de letras malabarista,
alimentado solo por el ron a palo
e ilusionado por el visionado y gusto de la soberana,
erigí castillos de naipes en el aire
para la relinda princesa de tabaco mendiga
y presencia doblemente efímera,
que creó recíprocamente asombro y gravedad,
pero que las lenguas de alquitrán
parecieron difuminar en la M30,
mientras que la pintura de las plantillas
marcaba mi cabeza con una L de lerdo,
y como no podía ser de otro modo
al final como en todo quedé solo
y sólo me quedó tu enfermedad...
aunque cada vez más marchita.

Tras lunas periódicas sucesivas...

Huellas en la nieve,
que revelan la hierba,
dejadas rodeado de miles de sombras,
entes borrosos, sinuosos,
estilosos, pomposos,
jubilosos y chisposos,
difuminados al mirar
a través la heineken,
oscurecidos por la larga
y sinuosa silueta del gato que yace en el tejado,
que hace que la todo se mire
con los prismáticos al revés,
excepto a él,
aparece y desaparece de su casa,
a su gusto y parecer,
casa hecha de músculos
casa pequeña pero ampliable,
casa incluso a compartir,
donde cada vez que pasa
a su casa reaviva las brasas
para que no se le enfríe su hogar.

Animadversión inducida

Existencia corrosiva,
esputo ácido provocado  por el salivar incesante,
por la espuma de las olas sociales
rompiendo en el desierto de arena árida de mis labios,
ardiente,
como el aire seco del lanzallamas que quema mi garganta
al intentar carbonizar a mi "yo" hecho de paja,
cada vez más sarmentoso de las mismas,
obligado por lo áspero de lo que me rodea,
por la casa de ortigas y la cama de fakir,
por preciadas ayudas externas
que como los panes y los peces,
multiplican, aunque no en número si no en tamaño,
el grosor y diámetro de mis cojones
en proporción a los sapos y culebras que farfullo,
a la bilis que recorre mis venas,
al peso del elefante que se posa en mi pecho
tras revolotear de flor en flor buscando ese polen,
más no encuentra maría que me relaje y abstraiga del desamparo.

Silicon March

La culpa fue de mi falta de acierto,
de que los méritos necesarios
nunca encotrasen su primavera,
y yo no supiese proporcionársela,
después de toparme súbitamente
con el amor en los labios,
y yo saborease con gusto su colonia,
después de conseguir un privilegio,
llegado sin merecimiento alguno,
por el que jugarse el sueño,
y el sustento y la bebida,
y de ser esto el pilar de mis sonrisas
y el más dulce manjar probado
y yo no tener nada valioso como ofrenda,
pretender apresar su imagen,
intentando impedir que la bruma lo tragase,
tirando de la soga que le ofrecí
pero nunca asió,
se desvaneció ante mi faz,
sembrando un vacío perpetuo
que por mucho que busque nada llena,
porque lo que necesito ya lo encontré
pero no me pertenece.
no lo hizo, ni lo hará jamás.

Veeneno

La ansiedad respiratoria y cardíaca de su ausencia
es mayor a la detonación nuclear
de sus afiladas palabras instintivas
imaginadas como gritos en pelotón fusilando mis tímpanos,
pero menor a la crucifixión inversa autoinducida
de mis propias neuronas sobre mi cabeza,
al suponer que al eliminarme el borrador del dibujo,
éste, transformó a color el blanco y negro,
y el borrón dejado sea la única tara que tenga.

De 100 a 0 en luna y poco

Porque cada sueño que soñaba,
era un veneno que tragaba,
una debilidad que confesaba,
y una coz en el hocico que recibía.

Porque cada onza de chocolate que decía,
era una aguja que escupía,
un alboroto diario que aparecía
y una coz en el hocico que se llevaba.

Porque por la estupidez que profesaba,
el azúcar en la amargura veía,
una dolorosa partida necesitaba
y un frío en los dedos renacía.

Jaculatoria primera padrenuestril

Atención: Este poema es una tanto extraño por su disposición, lo suyo para el mejor disfrute es leer 1 vez el poema, sólo por la parte de la izquierda y otra lectura línea por línea como si fuese de seguido. Gracias.




Querida zorra que que estás en mi mente,

                        (límpiate las garras)

maldigo mil veces el gusto de tu nombre,

(no me lo creo ni yo)

venga a mí tu cuerpo,

(al natural mejor)

odio cumplir tu voluntad en tierra, agua o cielo,

(en tu alfombra se está bien)

dame hoy los besos que olvidamos,

(¿y sis? que en realidad nada)

disculpa mis instintos animales como yo perdono cuando me ofendes,

(sed por tu aroma)

no me fuerces a caer en la tentación,

(no seas puta)

y líbrame de ti,

(o no...)

amor.

Heridas en salazón

El sabor de las palabras
dejaba un olor embriagador
a pesar de no ser reales,
a pesar de que no derribaban muros,
y ni si quiera eran correctas,
a pesar de que resquebrajaban
lo que nunca existió
y ni siquiera fue nato,
unilateral,
lanzando aullidos desesperados
de colorear mis labios
con los tuyos por fricción,
chillando en ultrasonidos
que sólo ven los ciegos,
porque el follar no hace el cariño,
y dos no sienten...si uno no quiere.

Miento si te digo que te odio

Odio las expectativas,
odio la realidad,
odio hablar de ello,
odio seguir en ese limbo,
odio que dentro de mi cráneo
solo haya otro músculo bombeante,
odio que sólo haya pezqueñinas,
odio que sólo lo bueno flote,
odio cortarme con esa facilidad,
odio los témpanos de hielo,
odio el olor felino,
odio pensar en el agujero,
odio esta vida de cremallera
y que se atasque tan a menudo,
odio lo que me miento,
odio pensar,
odio lo que jode,
odio equivocarme respecto a ti,
odio los gilipollas,
odio recordar y sentirme absurdo,
odio el azar,
odio que no existan los milagros,
odio las cuentas desde 0,
odio los comienzos repetitivos,
odio el camino que dejo,
odio tener escamas, ojos de reptil,
odio las comparaciones odiosas,
odio creerme esas mierdas,
odio los avisos,
odio tenemos que hablar,
odio escuchar  lo que
quizás pudo o  no ocurrir,
odio resultar tan gelatinoso,
odio arder como una papelina,
odio ser tan adicto,
odio no tener reinicio,
odio no tener paracaídas,
odio tu punto y coma,
odio ser el azúcar,
odio perderme,
odio ser un Lego,
odio tus puntos suspensivos,
odio tu luna creciente,
odio tu sonata de jolgorio,
odio mentir, odio mentirme.